En un momento sin precedentes para el mundo del deporte, la exnadadora zimbabuense Kirsty Coventry ha sido elegida como la nueva presidenta del Comité Olímpico Internacional (COI), convirtiéndose en la primera mujer, la primera africana y la persona más joven en asumir este cargo. Con 41 años, Coventry sustituye al alemán Thomas Bach, quien ocupó la presidencia desde 2013. Su mandato comenzará en junio y se extenderá por ocho años.
La elección de Coventry tuvo lugar en Grecia, donde obtuvo la mayoría absoluta con 49 de los 97 votos disponibles en la primera ronda de votación, superando a candidatos destacados como el británico Sebastian Coe, jefe del Atletismo Mundial y uno de los favoritos para el puesto.

Una carrera brillante en el olimpismo
Coventry es la deportista olímpica africana más condecorada de la historia, con un total de siete medallas olímpicas. Fue campeona consecutiva en los 200 metros espalda en los Juegos de Atenas 2004 y Pekín 2008, y compitió hasta los Juegos Olímpicos de Río 2016, tras los cuales anunció su retiro.
Desde 2013, Coventry ha estado vinculada al COI, cuando obtuvo su lugar en el organismo un año después de que una elección inicial de atletas en los Juegos de Londres 2012 fuera parcialmente anulada debido a una queja que ella misma presentó contra un oponente. Entre 2018 y 2021, formó parte de la junta ejecutiva del COI como representante de los atletas, trabajando bajo la administración de Thomas Bach.

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Un mandato en medio de controversias políticas
Además de su carrera deportiva, Coventry ha estado involucrada en la política de su país. Desde 2018, ejerce como ministra de Juventud, Deportes, Artes y Recreación de Zimbabue, cargo en el que fue ratificada tras las elecciones de 2023. Su nombramiento inicial generó sorpresa debido a su juventud, falta de experiencia política y su condición de mujer blanca en un país con una historia de tensiones raciales y políticas.
Su vinculación con el gobierno del presidente Emmerson Mnangagwa, sucesor de Robert Mugabe, ha sido objeto de críticas. La administración de Mnangagwa ha enfrentado acusaciones de represión a la oposición y violaciones a los derechos humanos, lo que ha llevado a sanciones por parte de Estados Unidos y la Unión Europea. Coventry ha defendido su papel dentro del gobierno, argumentando que su objetivo ha sido mejorar las condiciones para los atletas y la juventud de su país.

Sin embargo, tras su elección como presidenta del COI, Coventry anunció que probablemente renunciará a su puesto ministerial y se trasladará a Lausana, Suiza, donde se encuentra la sede del COI.
“Se ha roto el techo de cristal”
Durante su discurso de victoria, Coventry destacó la importancia histórica de su elección y el impacto que podría tener en futuras generaciones.
“La joven que empezó a nadar en Zimbabue hace tantos años nunca podría haber soñado con este momento”, expresó con emoción. “Estoy especialmente orgullosa de ser la primera mujer presidenta del COI y también la primera africana”.
Coventry enfatizó que espera que su elección sirva de inspiración para más mujeres y jóvenes alrededor del mundo, y reconoció la responsabilidad que implica ser un modelo a seguir en el mundo del deporte.
“Hoy se han roto los techos de cristal, y soy plenamente consciente de mis responsabilidades”, agregó.
Desafíos por delante
Como nueva líder del movimiento olímpico, Coventry enfrentará retos significativos. Deberá manejar la organización de los Juegos Olímpicos de 2028 en Los Ángeles y trabajar en la adaptación del olimpismo a un mundo en constante cambio, con desafíos como el impacto del cambio climático, la equidad de género en el deporte y las tensiones geopolíticas que han afectado la participación de ciertos países en eventos deportivos internacionales.